Fortaleza de Mutzig / Feste Kaiser Wilhelm II

Dinsheim sur Bruche

La fortaleza de Mutzig, construida entre 1893 y 1916, recibió el nombre de “Feste Kaiser Wilhelm II” en 1895. Fue la primera fortificación alemana construida con hormigón, íntegramente acorazada, ventilada y alumbrada con electricidad. Prototipo, sitio experimental, permitió también la elaboración de la fortificación fragmentada: obras dispersadas en el mismo lugar, enterradas y puestas en comunicación con galerías subterráneas. En 1914, sus dimensiones (254 hectáreas, 40 000 m2 de superficie subterránea útil, 22 torretas de artillería,...) hacen que sea la fortificación más poderosa y más amplia del Imperio alemán. Su estado excepcional de conservación y la calidad de las obras de restauración y de su disposición museológica hacen que hoy en día sea un lugar de memoria, de descubrimiento arquitectónico, tecnológico e histórico que lo sitúa entre los primeros en Alsacia. La visita permite descubrir obras muy diversas: abrigos de infantería, batería de artillería acorazada, observatorios acorazados, casamata para ametralladoras...Trincheras de tiro, numerosos objetos y equipos de origen todavía están presentes: central eléctrica, panadería, cocinas, pozos, habitaciones para la tropas con las camas, sala de operación y hospital, aseos... Se recomienda llevar ropa caliente.

La fortaleza de Mutzig, construida entre 1893 y 1916, recibió el nombre de “Feste Kaiser Wilhelm II” en 1895. Fue la primera fortificación alemana construida con hormigón, íntegramente acorazada, ventilada y alumbrada con electricidad. Prototipo, sitio experimental, permitió también la elaboración de la fortificación fragmentada: obras dispersadas en el mismo lugar, enterradas y puestas en comunicación con galerías subterráneas. En 1914, sus dimensiones (254 hectáreas, 40 000 m2 de superficie subterránea útil, 22 torretas de artillería,...) hacen que sea la fortificación más poderosa y más amplia del Imperio alemán. Su estado excepcional de conservación y la calidad de las obras de restauración y de su disposición museológica hacen que hoy en día sea un lugar de memoria, de descubrimiento arquitectónico, tecnológico e histórico que lo sitúa entre los primeros en Alsacia. La visita permite descubrir obras muy diversas: abrigos de infantería, batería de artillería acorazada, observatorios acorazados, casamata para ametralladoras...Trincheras de tiro, numerosos objetos y equipos de origen todavía están presentes: central eléctrica, panadería, cocinas, pozos, habitaciones para la tropas con las camas, sala de operación y hospital, aseos... Se recomienda llevar ropa caliente.